El promover la integridad y estabilidad familiar debe ser tu reto diario. Debes comprometerte a propiciar una actitud y una disposición conveniente en tu persona y en tus seres queridos para que logres contrarrestar las amenazas que continuamente perturban la vida familiar.
¿Por dónde empiezo?
A continuación te mostramos algunas sugerencias que pueden ayudarte a empezar a promover la integración familiar.
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Por expresar tu amor a las personas que te rodean en
forma abierta y natural. Tus hijos deben ver en ti la
expresión del amor entre los padres, un amor
incondicional en donde se permite la libre expresión y
se respeta la individualidad.
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Por brindar una comunicación sincera dentro de la
convivencia familiar que te permita conocer las
necesidades y sentimientos de todos los que la
integran.
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Hace que te liberes de los sentimientos de enojo,
culpa y miedo.
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Por conocer quiénes son las personas que te rodean, lo
que es importante para ellos, lo que les gusta o les
disgusta.
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Por crear espacios para convivir, pues la mejor
herencia que puedes dejarle a tu familia, es el amor y
el tiempo que juntos compartan.