Control de la fauna nociva

Cómo proteger a la lombriz de los depredadores

Las lombrices tienen distintos depredadores y hay que proteger los lechos.


INSECTOS

Los Ciempiés, gorgojos y hormigas no deben de considerarse peligrosos para la lombriz ya que no la atacan directamente. Sin embargo, se nutren de las grasas y de los azúcares presentes en la alimentación suministrada a las lombrices por lo que se hace necesario proteger los lechos de la acción de estos insectos que compiten por el alimento destinado a las lombrices.

Cómo controlar los insectos

La mayoría de los medios para el control de los insectos se basa en el uso de productos químicos. Dentro de la gama de insecticidas que actualmente se usan, los más recomendados son aquellos que tienen la característica de ser efectivos solamente por un período de tiempo -que puede variar desde unas horas hasta algunos meses- y después volverse inactivos y biodegradarse en compuestos no contaminantes.

En el caso en que sea necesario usar un insecticida deberán extremarse los cuidados.

Los insecticidas, deberán aplicarse solamente alrededor de los lechos y no directamente sobre ellos. La aplicación deberá hacerse cuando menos a 60 cm. de distancia del borde del lecho.


En el caso de algunos insectos, como los gorgojos y los ciempiés, es preferible utilizar un lanzallamas, para eliminarlos sin perjudicar el cultivo.

TOPOS

Son especialmente peligrosos ya que les encantan las lombrices; de hecho, puede considerarse que las lombrices son uno de sus alimentos básicos, por lo que la presencia de un topo en el interior de un lecho puede provocar muchos daños, ya que un topo puede devorar toda la población del lecho en unos pocos días.

Cómo controlar a los topos

No se debe usare ningún producto topicida; deberá, recurrirse a la utilización de trampas que no lastimen al animal u otros medios de este tipo en las principales vías de acceso a la explotación
También puede controlar a los topos protegiendo los lechos con malla galvanizada de calibre 20 o bien, con malla desplegada de acero del mismo calibre. El procedimiento consiste en armar con la malla una cerca o cajón que rodee todo el lecho. Este cajón debe tener al menos 15 cm. de altura para evitar que los topos, las ratas o los ratones puedan saltarlo.


Última actualización: 2002-05-28 11:19 AM