Explicación y predicción
Como
reformador de la educación, usted no sólo está interesado
en la descripción, sino también, y principalmente, en
la relación entre diferentes ‘objetos’ (o ‘variables,’ en
la jerga estadística). Usted quisiera saber qué explica
o qué causa la realidad educativa de su país. También
desearía poder, en alguna medida, predecir las consecuencias
concretas de las diferentes opciones de reforma educativa. Por ejemplo,
si desea aumentar la matrícula de las niñas en zonas
rurales, le gustaría saber qué elementos o acciones tendrán
un efecto positivo en aumentar la matrícula de las niñas. ¿Construir
escuelas más cerca de sus casas? ¿Contratar más
maestras del sexo femenino? ¿Reducir las tasas de delincuencia?
La estadística constituye una fuente crucial de apoyo para identificar
estos elementos. Es necesario
ser siempre muy cautelosos en nuestras conclusiones respecto de explicaciones
y predicciones estadísticas. En el mejor de
los casos, la estadística puede establecer lo que los especialistas
llaman una “correlación” entre diferentes elementos
(“variables”), es decir, establecer que los elementos que
se están midiendo se comportan como si estuvieran correlacionados.
Por cierto, también puede establecer que no hay ninguna relación
entre los objetos estudiados. Pero la estadística no puede establecer
causalidad. En otras palabras, no se puede inferir causalidad sobre
la base de una correlación. Debemos ser muy cuidadosos. La presencia de causalidad sólo podrá sostenerse en forma razonable luego de haber propuesto una teoría aceptable para explicar la relación meramente fáctica entre los elementos o ‘variables’. En términos estrictos, aun cuando se haya propuesto una teoría aceptable para explicar una relación que también parece estar respaldada por los hechos, ésta será siempre una “hipótesis” en espera de ser, tarde o temprano, rebatida. Una hipótesis es una afirmación acerca de la relación empírica existente entre dos variables. Una hipótesis no podrá nunca ser definitivamente comprobada, ya que incluso cuando los hechos del mundo real nunca han contradicho dicha hipótesis, siempre existe la posibilidad de que ello ocurra en el futuro. La estadística sólo puede apoyar o rechazar una determinada hipótesis acerca de las relaciones entre los objetos que nos interesan, pero nunca probarla. |